viernes, 3 de agosto de 2012

Desalmadas



Desalmadas I

Aristóteles sabía lo que decía:
—La hembra es como un macho deforme. Le falta un elemento esencial: el alma.
Las artes plásticas eran reinos prohibidos a los seres sin alma.
En el siglo dieciséis, había en Bolonia quinientos veinticuatro pintores y
una pintora.
En el siglo diecisiete, en la Academia de París había cuatrocientos treinta y
cinco pintores y quince pintoras, todas esposas o hijas de los pintores.
En el siglo diecinueve, Suzanne Valadon fue verdulera, acróbata de circo y modelo de Toulouse-Lautrec. Usaba corsés hechos de zanahorias y compartía su estudio con una cabra. A nadie sorprendió que ella fuera la primera artista que se atrevió a pintar hombres desnudos. Tenía que ser una chiflada.
Erasmo de Rotterdam sabía lo que decía:
—Una mujer es siempre mujer, es decir: loca.

Eduardo Galeano 
en Espejos Una historia casi universal


Suzanne Valadon



Desnudo con colcha de rayas, 1922

Habitación azul,1923

A continuación un extracto de una reseña biográfica que pueden consultar completa Aquí 

SUZANNE VALADON 1865-1938
Marie-Clémentine Valadon, nació en Bourg de Bessines (Limoges) como hija de Madeleine, madre soltera que se traslada a París afincándose en el barrio de Montmartre. Allí creció casi abandonada dedicándose a cualquier trabajo eventual con el que pudiera mantenerse. Así, además de  recadera, fue modistilla, planchadora y lavandera.

 A los 15 años, estando en el antiguo "Cabaret de los Asesinos", (después "Lapin Agile"), al que su dueña Adèle, la dejaba entrar y ayudar a servir en las mesas mientras oía cantar y tocar la guitarra, uno de los clientes le propuso trabajar como acróbata de circo, dada su buena constitución. Se trataba del "Cirque Molier", que había sido instalado con enorme éxito en la Place de Pigalle. La noche siguiente, Marie, vestida con un falda descolorida de gasa y lentejuelas, actuó por primera vez bajo la carpa como auxiliar de acróbatas. Luego será amazona, y finalmente  trapecista, hasta que una caída que estuvo a punto de costarle la vida, terminó con aquella aventura circense. Recordará después como terminada la representación, acudía al bar del establecimiento vestida con un maillot rosa y su falda de oropel, para recibir a los admiradores y sus felicitaciones. Recordará como allí vio por primera vez a los pintores como Degas, Forain, Willette, Léandre o Toulouse-Lautrec, para el que traían un taburete especial.  Otra profesión ocasional muy frecuente entre las jovencitas de las clases más pobres de Montmartre, fue la que en cierto modo le haría cambiar su vida y pasar a la historia, al iniciarse como modelo de artistas a los 16 años. Su rostro y su figura, vestida o desnuda, sirvió como referencia para las obras de grandes pintores de la época, además de los citados, Puvis de Chavannes, Renoir y Zandomeneghi.




Bosque Sagrado amado por las Artes y las Musas. 1884
La obra para la que Marie-Clémentine poso para todos los personajes




Marie, también conocida como "la bellísima Marie" o "la terrible Marie" vive en la rue Poteau, y al primer taller que asistirá como modelo en 1882, se encontraba en la rue de Mont-Cenis, el del viejo maestro Puvis de Chavannes del que se burlaban los pintores más jóvenes de Montmartre, porque pintaba temas mitológicos, llenos de venus y apolos coronados de guirnaldas y laureles. Marie poso para todos personajes de su "Bosque Sagrado amado por las Artes y las Musas" fechado en 1884. A pesar de sus años, pintor y modelo mantuvieron durante algún tiempo una relación que iría más allá de la puramente profesional.

Degas conoció a Marie por mediación de su amigo el escultor Bartholomé, para el que posiblemente había posado. Degás al ver los dibujos que la joven promesa le presentó en su taller, no solo fue el primero en animarla a pintar, sino que también compro uno de sus dibujos a sanguina que enmarcó y colocó en su salón. Aunque es fácil pensar que Valadon sirvió de modelo para alguno de los muchos desnudos del maestro, no tenemos confirmación de que así fuera. Sí se sabe no obstante, que Degas le escribía esporádicas notas afectuosas, interesándose por ella y pidiéndole que lo visitara y le mostrase sus trabajos. Degas dejó una fuerte influencia en el estilo y la temática de muchos de sus dibujos y pasteles ejecutados hacia 1900

(...)
Independiente, bohemia, libertina, mentirosa y bebedora empedernida. Se cuenta que muchas noches, al volver de sus sesiones de trabajo y de divertirse con algunos amigos por las tabernas del viejo Montmartre, encontraba en su puerta un ramito de flores con una nota de Lautrec que decía: "Vale por unos vasos de absenta".


Gula de beber o La bebedora, 1887-88 Valadon pintada por Lautrec


Las juergas que montaba Lautrec en su estudio eran tan sonadas y famosas como abundantes las bebidas alcohólicas y los cócteles que el mismo preparaba. A más de una de ellas debió acudir la bella vecina, la modelo que tiempo después contaría cómo en el transcurso de una de estas reuniones, presenció una de las situaciones más  violentas que recuerda. En medio del bullicio de la fiesta .....entró un hombre con una máscara rota y con una pesada tela enrollada bajo el brazo, la extendió en un rincón apartado aunque bien iluminado, y extrañamente esperó a que alguien le prestase alguna atención. Nadie le decía nada. Se sentó un rato, vigilaba las miradas y no intervino en conversación alguna. Después, cansado de esperar, volvió a enrollar su obra y se marchó por donde había venido sin articular palabra. Era el pelirrojo pintor holandés, Vincent van Gogh hermano de Théo, recién llegado a Paris, que había conocido a Lautrec y sus amigos en el Taller de Cormon en marzo de 1886.


Polvos de arroz, 1887
Valadon pintada por T.Lautrec
Valadon pintora

Pero aún queda por desvelar el mayor secreto de Marie. Incentivada por el trabajo de todos aquellos grandes pintores para los que posaba, cuyas técnicas observaba diariamente, empezó a sentir el deseo de hacerlo ella misma. Según se cuenta fue Renoir el primero en descubrir su afición a la pintura en 1885, cuando un día que tardaba en llegar al jardin del taller de la Rue Chevalier-de-la-Barre donde trabajaba,  decidió ir a buscarla y la encontró terminando un boceto de un niño lavándose. Al ver a Renoir, intenta esconderlo tras una alacena, y el pintor, tras quitárselo y mirarlo detenidamente le reprochó que quisiera ocultarlo, añadiendo que estaba perdiendo el tiempo posando como modelo. A parte de esto no hizo nada más por ayudarla. 


Suzanne Valadon modelo de Renoir 1883
El baile en Bougival

Sus primeros dibujos los presentó a Degas, quien tenía fama de apoyar a los jóvenes artistas, y así los valoró en gran manera, se los comentó y le dio consejos, añadiendo que era una artista y debía proseguir en su empeño de ser pintora. 
A Toulouse-Lautrec tal vez el pintor a quien más admiró, también le ocultó su afición hasta que un día en su estudio casualmente encontró traspapelados algunos dibujos suyos. Su sorpresa fue tal que enseguida los colocó en la pared y cada vez que algún compañero venía a visitarlo, le preguntaba si sabía de quienes eran, citando a Steilen, Willette o incluso al propio Degas. A partir de entonces, aprobando su decisión de ser pintora, con todo el sarcasmo que le caracterizaba, le sugirió su nombre "artístico". Un nombre que sólo podría ser el de "Suzanne" habida cuenta de que "había posado desnuda para todos los (pintores) viejos de Paris". Es así como Marie-Clementina Valadon, paso a ser "Suzanne Valadon".
Se dice que trabajó durante trece años en sus óleos antes de enseñarlos públicamente. Hizo su primera exposición individual en 1915, y obtuvo un éxito rotundo tanto comercial como de crítica. Su obra, compuesta por retratos, paisajes y desnudos, pletórica de colores brillantes y vigorosos, ha sido clasificada como postimpresionista y fauvista. 
Valadon murió en 1938 y a su funeral acudieron grandes personajes de la comunidad artística de París incluyendo a Picasso, Georges Braque y André Derain. Su tumba está en el cementerio de St.Ouen Seine-St.Denis de Paris.




Desnudo por Suzanne Valadon

Fuente del extracto de la reseña: Suzanne Valadon

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario,opinión,sugerencias...